Los implantes sustituyen a los dientes perdidos con el mismo aspecto y tacto que los dientes naturales. Otras opciones de sustitución de dientes pueden provocar el deterioro del diente o del hueso e interferir en la alimentación, la sonrisa, el habla y otras actividades de la vida diaria.
Los implantes tienen un mejor historial a largo plazo que los puentes dentales tradicionales, que a menudo sólo duran entre cinco y diez años.
Los puentes dentales tradicionales necesitan ser reemplazados en algún momento y a menudo conducen a la pérdida adicional de dientes. Con los cuidados adecuados, los implantes dentales pueden durar toda la vida.
Ya no tendrá que sentirse incómodo en público, avergonzado o preocupado por si se le caen los dientes al comer, hablar o sonreír. Los dientes soportados por implantes le devolverán la confianza en sí mismo.
Los implantes pueden sustituir tus dientes y devolverte la sonrisa. Pero, ¿sabía que también mantienen el contorno de su cara al conservar la forma de sus mandíbulas? Cuando se pierden los dientes, los huesos de la mandíbula empiezan a deteriorarse, casi inmediatamente.
Esta pérdida de hueso mandibular puede alterar el contorno de su cara. Una cara sin dientes y con el hueso de la mandíbula disminuido puede descolgarse y parecer vieja y arrugada.
Los implantes dentales son la única opción de sustitución de dientes que también mantendrá la estructura ósea de la mandíbula, lo que le permitirá conservar la forma natural de su cara, así como su sonrisa.
La pérdida de dientes puede provocar problemas de salud adicionales, como la pérdida y el deterioro del hueso de los maxilares y la cara. Cuando el hueso no está en función, como cuando falta un diente y no se sustituye por un implante dental, el hueso se deteriora, perdiendo su fuerza y forma.
Este deterioro óseo se acelera cuando se llevan dentaduras postizas removibles. Los implantes son la única opción de restauración dental que preserva y estimula el hueso natural, previniendo la pérdida ósea debida a la falta de dientes naturales.
Los implantes le permitirán mantener sus dientes donde deben estar – en su boca – no en un vaso en su mesilla de noche. Duérmase por la noche y despiértese por la mañana con su sonrisa intacta.
Vuelve a disfrutar de los alimentos que más te gustan sin dudarlo. Puede morder con naturalidad, comer casi todo lo que quiera y, a diferencia de las incómodas prótesis removibles, con los implantes dentales podrá volver a experimentar todo el sabor, la textura y la temperatura de los alimentos.
Sustituir los dientes por un puente requiere tallar varios dientes adyacentes al diente que falta, dañando así de forma permanente los dientes sanos para sustituir los que faltan.